Mi querida Katryona, ya sabes que algunas veces, soy yo la que me acerco a ti...tardo en hacerlo, pues pienso que llamemosle "vida", es ya de por si tan triste, que me deseagrada, añadir a tus penas, las mias.
Pero, tambien se que tu me encucharas, nuestras largas conversaciones con la unica presencia viva, de las estrellas y la brisa de estas calidas noches de verano, siempre versan sobre tu melancolia, sobre tu sufrimiento, sobre esa pena que innunda tu alma perdida, tú mi dulce y joven amiga Katryona, buscas consuelo, en mis palabras, y asi placidamente vas desapareciendo de mi vista con una dulce sonrisa en tus labios...y es entonces cuando yo desearia abrirte mi alma...pero me lo impide, precisamente el ver como te vas en paz con ese rostro renovado.
Por esa razon te escribo desde aqui, donde dia a dia entras a leer y de alguna forma dar el visto bueno, a tus conversaciones conmigo, se que no solo me leeras, si no que llegaras a mi, en algun momento de la noche, y tal vez me tomes de la mano, como ha hecho aveces y me lleves a esa playa de fina arena donde las olas rompen con la unica presencia de la noche estrellada y la luz de esa Luna que ambas amamos.
Asi pues mi dulce niña, he de decirte que me siento, tan triste, tan desolada, tan perdida...el horizonte no existe, la tierra cede a mi paso y me hundo dia a dia, en el fondo de una cienaga...se que todo esta en mi cabeza, demasiadas penas, desprecios, sufrimientos. Silencios obligados para no dañar, que me dejan sin respiracion llevando incluso al desmayo.
Todo eso y mucho mas es por lo que estoy pasando...y no le veo, el fin. Es como si, cuando una puerta se cierra, otra se abriera y en el momento de estrar para escapar esa nueva puerta se volviera a cerrar...
Ya veras como me siento amiga, he tardado mucho en dar el paso para hacerte, participe de todos esas tristezas...pero se, que como siempre me vas a escuchar y tambien como siempre vas a ser mi balsamo, incluso tal vez mi salvacion.
