miércoles, 24 de junio de 2009


Una noche en Munich era el mes de Junio del año creo 1867, hacia mas o menos 37 años que yo vagaba por el mundo de los vivos, siempre me llamo el centro de Europa, Viena,. Salburgo, Praga, ciudades fastuosas llenas de arte.....y una noche abandone el cementerio de la ciudad de Munich, necesitaba sentir el calor de los humanos y me mezcle entre ellos, ante mi aparecio el gran teatro de la opera de esa ciudad, habia mucha gente, todos con sus mejores ropas, el ambiento olia a perfume, y a flores, que se mezclaba con el aroma del tabaco de los hombres, impacientes esperaban que las puertas se abrieran......
Llegada la hora , la gente entro en el lugar, recuerdo que era bello su interior, a los pocos minutos las luces de gas de su interior se apagaron y solo quedo iluminado el escenario....lo que vino despues de dejo casi traspuesta se interpreto ante mi la obra de Wagner "Los Maestros Cantores de Nuremberg", yo apenas conocia su obra esta estaba en sus comienzos, pero fue una experiencia cuyo recuerdo que jamas olvidare.

miércoles, 17 de junio de 2009

Una vez en Paris....

Pues bien con esa forma impresa para moverme en este mundo, lleno de seres tan distantes a mi, una mañana soleada del mes de Octubre del año 1885, hice mia la ciudad de Paris, una ciudad alegre y luminosa donde se engendraba todo el arte de esa epoca.

Hacia el mediodia, tras un paso por las orillas del Sena, me encamine a las escalinatas, que ascienden a Le Sacre Cor, en el barrio de Montmatre, pase frente a locales nocturnos cerrados a aquellas horas, como el Salón de la Rue des Moulins, el Moulin de la Galette, el Moulin Rouge, Le chat noir, el Folies Bergère, pero mis pasos me llevaron a un pequeño café, sus paredes cubiertas de espejos, adosados a las mismas habia unas bancas, tapizadas de terciopelo, algo ajado de color Burdeos, las mesas de marmol blanco, con patas de hierro forjado en negro. En una mesa, sentado enfrascado con un carboncillo en su mano , habia un pequeño hombre, moreno con una notable barba, trzaba con fuerza sobre unas hojas de papel...la puerta del local se abrio, el aire frio del otoño parisien, invadió el local dando paso, a una exuberante mujer, por su aspecto me parecio una prostituta, habia visto varias de ellas por el barrio.

El hombrecillo de la mesa, abandono su boceto y con una agilidad soprendente, empezo a dibujar a la mujer, cuando termino recogio sus dibujos, los guardo en una vieja bolsa de cuero y se levanto de su mesa. Fue entonces cuando pude observarle, era muy pequeño casi un enano, con una malformacion en la espalda, y caminaba cojeando, cuando salio del local el camarero se desìdio de él con un "Jusqu'à la nuit, Monsieur Lautrec.

miércoles, 10 de junio de 2009

Mi otro viaje a Japon...


Durante un tiempo estuve viviendo en Japon pero , hacia los años 20 lo abandone y volvi a mi Europa natal, donde estuve unos años atravesando el Atlantico, para alguna que otra,estancia en los Estados Unidos de America.

Pero cuando la Segunda Gran Guerra estallo, no encontraba lugar donde sentirme bien, eramos demasiados como yo, la poblacion humana quedo diezmada y fuera a donde fuera estaba rodeadas de mas de 70.000 almas aun mucho mas atormentadas que la mia, que con los años habia asumido lo que era. Y asi pase toda la terrible epoca en America, pero casi acabando ese horrible periodo, tuve la necesidad de volver a mis islas del mar del Japon y recale en el puerto de Nagasaki , que poco imaginaba yo, lo que me deparaba esa vuelta, cuando llegue la ciudad seguia siendo bellisima no habia cambiado con los años.

Solo unas horas despues, lo que vieron mis ojos y senti a mi alrededor, me ivan hacer renegar de la raza humana, a la que nunca habia abandonado ni siquiera estando muerta. Lo que vi , lo que senti era inenarrable, la sensacion terrible , yo no podia morir, pero hasta mi espiritu deseaba ser fulminado.

En segundos las calles quedaron en cenizas y las gentes ardian y caian al suelo carbonizadas, otras quedaban de pie como negras estatuas, todo era eliminado, solo un terrible calor y un densa nube que poco a poco lo cubrio todo.

Y asi abandone esas islas poseidas por el odio y la muerte, ya nunca mas volvi, creo que si lo hiciera, las imagenes del pasado, no me dejarian disfrutar de ese nuevo mundo en que se ha convertido.

Os dejo una imagene contenida en mi vieja memoria........dicen que recordar sirve para no volver a vivir, esos momento, sea pues esa la unica razon por la que yo hoy he vuelto a sufrir recordando a JAPON...

miércoles, 3 de junio de 2009

Japon.....


Y segui viajando, algo dentro de mi me obligaba a ello, siendo muy niña antes de morir, mi padre un gran amante de los viajes,hizo que me aficionara a ellos y asi despues de mi muerte, era algo que segui haciendo...

En Japon...durante esos años en los que estaba muy lejos el horror y la muerte... Que bella ciudad era Nagasaki cuando yo la conoci, muy consmopolita y con ese gusto por la estetica, que aun pasados los años los japoneses conservan.

Llevaba ya algunos años visitando las Islas, cada vez me era mas facil mezclarme con los humanos, ellos apenas notaban mi presencia, generalmente eterea, pero aqui en esta ciudad, comprobe que podia hacerme visible, a los ojos de los vivos, durante un tiempo esta peculariedad mia solo , era posible durante las noches sin luna cuando apenas habia luz, pues por aquel entonces, solo las luces de gas de las pocas farolas iluminaban las calles con lo cual, la luz era casi inexistente, pero me agradaba verme a mi misma, mis manos , mi cuerpo, pronto comprobe que tambien podia mirarme en los espejos y escaparates,consegui ropa nueva, hasta entonces, llevaba el vestidito, blanco con el, que mis padres mi amortajaron y unos pequeños botines de charol del mismo color....
Cambie mi vestuario, por ropas de organza de colores, azul palido, rosa y sobre todo un color que me volvia loca el malva, recogia mis rizados y oscuros cabellos con una cinta de terciopelo de iugal color.... Me sentia bien, casi humana, entre humanos, aunque solo fuera posible durante las largas noches, despues al alba de nuevo era solamente un ente invisible.....
Pues bien como he dicho en esta bella ciudad ocurrio, ese cambio en mi y por eso la recuerdo con mucho amor, de alguna manera mi "no vida" dio una vuelta de tuerca, ya nada seria igual, se me habrian nuevos horizontes.