martes, 8 de mayo de 2012

Le Confiserie



Ayer entre unas fotografias que mi buena amiga nekro, guardaba en una cajita, encontre esta , estaba vieja y gastada...
Cuantos recuerdos vinieron a mi mente con ella entre mis manos. Mi papa era  muy amante, de los viajes y del arte y cuando cumpli los siete años empece acompañarle a casi todos sus viajes.
Recuerdo uno en especial, lo haciamos amenudo, era  a la bellisima ciudad de Paris. Saliamos al amanecer de nuestro querido Londres y en el ferry llegabamos a Cale, depues de ahi a esa hermosa ciudad. Europa entera hervia con las nuevas tendencia del arte, y Paris era la gran señora y anfitriona de ese arte. 
Una vez ahi nos alojabamos en un pequeño hotelito, lujoso pero entrañable. Lo cierto es que yo estaba en una edad, en la que los niños, no estan siempre dispuestos, a pasar interminables horas en museos , salas de exposiciones e interminables tertulias literarias. Asi pues mi papa a modo de chantaje, cumplia con un rito diario. Al salir del hotel bien de mañana, me tomaba de la mano y atravesabamos aquella pequeña callecita, justo enfrente habia una pasteleria y bomboneria, una vez ahi se paraba frente a la puerta y con un brillo muy especial en los ojos , me invitaba a entrar  ahi,  yo me hacia la dueña de la situacion, siempre saliamos con una cuantas cajitas, bombones, dulces y sobre todo un croissant recien salido del horno que yo iva degustando, camino hacia ese periplo artistico, en  esa maravillosa ciudad.
Asi ayer , con  esta fotografia entre mis manos, senti un tremendo dolor  y  a la vez nostalgia, fueron años tan bellos aquellos, y duraron tan poco...
Despues de mi muerte, he visitado Paris tantas y tantas veces, pero nunca he vuelto a esa tiendecita , supongo que no he querido revivir esas dulces horas...uno hulle del dolor, pero aveces aparece sin llamarlo.